Historia de amistad entre una niña y una ratoncita. Iremos conociendo cómo son ambas, sus familias, dónde viven y cómo se conocieron. Agustín Fernández Paz describe la historia desde los dos puntos de vista: de cómo sienten el peligro los ratones cuando hay humanos y cómo ven estos a dichos animales. Con ternura e ingenuidad nos mete en la historia y hasta nos hace sentir pena por los ratoncillos.
Historia de amistad entre una niña y una ratoncita. Iremos conociendo cómo son ambas, sus familias, dónde viven y cómo se conocieron. Agustín Fernández Paz describe la historia desde los dos puntos de vista: de cómo sienten el peligro los ratones cuando hay humanos y cómo ven estos a dichos animales. Con ternura e ingenuidad nos mete en la historia y hasta nos hace sentir pena por los ratoncillos.
Amistades secretas
Una familia de ratones
Cuando Ojos Grandes nació, ni ella ni los otros dos ratoncitos de la camada podían ver nada de lo que había a su alrededor. Solo eran unas diminutas bolas de color rosado, incapaces de abrir los ojos, que pasaban las horas durmiendo y únicamente se despertaban para buscar con ansia el alimento que les proporcionaba su madre.
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