La limpieza de trazo y un personal estilo, que bebe de la obra de grandes autores contemporáneos como Max, constituyen la base gráfica de una inquietante obra sin palabras. Ante el futuro distópico y salpicado de pesadillas con el que se enfrenta el lector, sobran los vocablos. La crítica social, escondida en finos trazos de humor, aparece en cada esquina de esta hipnótica ciudad, en donde la aparición de un hombre con un misterioso maletín va a producir nuevos efectos. Dos personajes, un oficinista distraído e imaginativo, y un androide programado para ayudar en las tareas domésticas comparten destino: la vida en un futuro gris y mecánico, un entorno hostil representado con exquisita precisión en una estructura narrativa compuesta de viñetas organizadas según los cánones clásicos. Ciencia ficción que, en algunos momentos, se parece angustiosamente a la realidad cotidiana, ideal para los amantes del género.
La limpieza de trazo y un personal estilo, que bebe de la obra de grandes autores contemporáneos como Max, constituyen la base gráfica de una inquietante obra sin palabras. Ante el futuro distópico y salpicado de pesadillas con el que se enfrenta el lector, sobran los vocablos. La crítica social, escondida en finos trazos de humor, aparece en cada esquina de esta hipnótica ciudad, en donde la aparición de un hombre con un misterioso maletín va a producir nuevos efectos. Dos personajes, un oficinista distraído e imaginativo, y un... Seguir leyendo