Año 1342, a muchos kilómetros del bosque de Sherwood, en la encantadora zona de la Toscana italiana, a medio camino entre Siena y Florencia, la pequeña Tosca ejerce de Robin Hood transalpino realizando sus "fechorías" con la ayuda de su hermano Rinaldo (que en realidad tiene otros sueños) y su fiel mascota, el halcón Argo. Una de las acciones delictivas de la pareja de huérfanos (siempre con el honorable objetivo de ayudar al más débil), va a convertirse en la excusa perfecta para que Lucilla, heredera del castillo de Castelguelfo, escape de una boda pactada sin su consentimiento y de sus estrictas obligaciones como miembro de la nobleza. Aprovechando las hábilidades como ladrona de Tosca, la joven se une a la troupe de aventureros, decisión que le permitirá comenzar a saborear la vida en su dimensión real. Aventuras, humor, sentimientos a flor de piel... Teresa Radice y Stefano Turconi, dos de los más interesantes talentos del fumetti, retoman su producción en equipo tras los excelentes títulos que nos brindaron en el pasado (especialmente destacables el monumental El puerto prohibido y Lila Trotamundos). Con un estilo muy característico, claramente inspirado en los dibujos animados -trabajaron durante varios años para la factoría Disney en la emblemática revista Mickey Mouse-; pero con una interesante fusión de los conceptos clásicos de la "escuela" franco-belga, y cierta estética retro, la obra se convierte en todo un homenaje a los clásicos, con inteligentes referencias solapadas a otras obras literarias, que permitirá a los preadolescentes saborear con nueva mirada una aventura "de las de antes"
Año 1342, a muchos kilómetros del bosque de Sherwood, en la encantadora zona de la Toscana italiana, a medio camino entre Siena y Florencia, la pequeña Tosca ejerce de Robin Hood transalpino realizando sus "fechorías" con la ayuda de su hermano Rinaldo (que en realidad tiene otros sueños) y su fiel mascota, el halcón Argo. Una de las acciones delictivas de la pareja de huérfanos (siempre con el honorable objetivo de ayudar al más débil), va a convertirse en la excusa perfecta... Seguir leyendo