El señor Nadie es gris, como algunos días en invierno, tiene la apariencia de un ser misterioso e inquietante y su aspecto y movimientos avivan la imaginación de los niños de la ciudad. Sin embargo, como en aquel verso de Juan Larrea, pocos conocen sus verdaderos sentimientos y las acciones que desarrolla en el atardecer. Gracias a él, cada noche, las estrellas brillan en el cielo oscuro como resultado de un proceso en el que demuestra dominar las viejas recetas. Sus encargos siempre tienen destino, cuando no la inmensidad de la noche otros derroteros a los que manda, vía postal, el resultado de la alquimia que no salió tan bien como esperaba. Tras su labor cotidiana desaparece sin que la población conozca su preciada labor anónima, que ahora la artista polaca, afincada en Francia, Joanna Concejo da a conocer a través de emocionantes ilustraciones, en grafito y colores fríos, siguiendo la tónica de anteriores e igualmente espectaculares trabajos como Grande y pequeño o Zimbo.
El señor Nadie es gris, como algunos días en invierno, tiene la apariencia de un ser misterioso e inquietante y su aspecto y movimientos avivan la imaginación de los niños de la ciudad. Sin embargo, como en aquel verso de Juan Larrea, pocos conocen sus verdaderos sentimientos y las acciones que desarrolla en el atardecer. Gracias a él, cada noche, las estrellas brillan en el cielo oscuro como resultado de un proceso en el que demuestra dominar las viejas recetas. Sus encargos siempre tienen destino, cuando no la inmensidad... Seguir leyendo
El señor Nadie
En un barrio como tantos otros donde la gente, los perros y las casas son todos iguales. En un barrio donde es fácil no dar los buenos días al vecino.
En un barrio donde normalmente el cielo es de color cemento.
En un barrio donde llueve a menudo... a menudo...