Manny vive con sus tres hermanos y sus caóticos padres en un barrio residencial de una ciudad de California. Su padre bebe, su hermano mayor no da un palo al agua, y él, su hermana y su madre hacen lo posible por traer comida a casa. En el barrio no es fácil apañárselas solo. Todo es mucho más fácil si logras que se te respete. Y eso es casi imposible si no formas parte de una banda. Desde un intento de tomar decisiones maduras y responsables, Manny Hernández pretende ganarse la vida, estudiar, y no buscarse problemas en su colonia. Pero eso no es posible hacerlo en solitario, menos aún si pretendes ser capaz de echarte algo parecido a una novia.
Manny vive con sus tres hermanos y sus caóticos padres en un barrio residencial de una ciudad de California. Su padre bebe, su hermano mayor no da un palo al agua, y él, su hermana y su madre hacen lo posible por traer comida a casa. En el barrio no es fácil apañárselas solo. Todo es mucho más fácil si logras que se te respete. Y eso es casi imposible si no formas parte de una banda. Desde un intento de tomar decisiones maduras y responsables, Manny Hernández pretende ganarse la vida, estudiar, y no buscarse problemas en su... Seguir leyendo
El loro en el horno
Aquel verano mi hermano Bernardo, o Nardo, como nosotros lo llamábamos, pasó por más empleos que un pulgar en una baraja. Primero fue lavaplatos: después, ayudante de camarero; luego vigilante de aparcamiento y, finalmente, suplente de un tipo que parecía no aguantar más de diez minutos seguidos en un puesto de hamburguesas (mamá pensaba que vendía marihuana, o que se dedicaba a alguna otra actividad ilegal). Nardo perdió un trabajo por no presentarse con la suficiente regularidad, otro por presentarse con demasiada regularidad –el jefe no podía ni verlo.El último lo perdió cuando el dueño de la hamburguesería hizo las maletas inesperadamente y se largó.
