Si vives en una gran ciudad o viajas con frecuencia por carretera, seguramente alguna vez has sufrido este problema. Vas montado en el coche y repentinamente apareces inmerso en un descomunal atasco. En este caso da igual que utilices un coche, un camión, un patinete, una bicicleta, un monociclo, incluso que vayas aún en carrito o que conduzcas una hormigonera. Algo pasa en la carretera y los policías de tráfico son incapaces de encontrar soluciones. Tras un tremendo temblor las cosas parecen esclarecerse, ¿preparados para la gran sorpresa? La introducción de una doble página troquelada refuerza el efecto que produce el simpático incidente que ha causado tantas dudas e inconvenientes. Una inteligente historia (repleta de pequeñas acciones y divertidas conversaciones entre los protagonistas), para disfrutar leyendo en compañía al mismo tiempo que aprendemos los nombres de distintos medios de transporte (recogidos en un glosario final en las guardas)

Si vives en una gran ciudad o viajas con frecuencia por carretera, seguramente alguna vez has sufrido este problema. Vas montado en el coche y repentinamente apareces inmerso en un descomunal atasco. En este caso da igual que utilices un coche, un camión, un patinete, una bicicleta, un monociclo, incluso que vayas aún en carrito o que conduzcas una hormigonera. Algo pasa en la carretera y los policías de tráfico son incapaces de encontrar soluciones. Tras un tremendo temblor las cosas parecen esclarecerse, ¿preparados para... Seguir leyendo