De cada 100 niños, ¿cuántos viven en cada continente? ¿Quiénes disfrutan de una vivienda digna? ¿Qué idiomas hablan? ¿Qué religión profesan? ¿En qué sistema político conviven? Los datos no mienten y la lectura de esta obra informativa generará cierto desasosiego en cualquier lector con un mínimo de empatía, pero es la realidad. El mundo se ha transformado paulatinamente en un lugar que no garantiza al 100%  los derechos fundamentales de la infancia. Sin embargo, ante tanta estadística demoledora, los autores también esbozan ciertas cifras optimistas: el descenso en los casos de mortalidad infantil, desnutrición o en las cifras de niñas obligadas a casarse, o la cada vez mayor escolarización y el menor índice de chicos y chicas que se ven condenados a trabajar en las primeras edades. Avalado por los estudios que organizaciones sin ánimo de lucro como Save the Children o entidades como la ONU, descubrimos que en las últimas décadas han mejorado distintos indicadores en 173 de los 176 países analizados. A cada tema se le dedica una página completa, y viene aderezado de una colección de imágenes realizadas a través de procedimientos digitales que sirven como complemento explicativo a las informaciones que se incluyen en cada apartado.

De cada 100 niños, ¿cuántos viven en cada continente? ¿Quiénes disfrutan de una vivienda digna? ¿Qué idiomas hablan? ¿Qué religión profesan? ¿En qué sistema político conviven? Los datos no mienten y la lectura de esta obra informativa generará cierto desasosiego en cualquier lector con un mínimo de empatía, pero es la realidad. El mundo se ha transformado paulatinamente en un lugar que no garantiza al 100%  los derechos fundamentales de la... Seguir leyendo