Homenaje a la escultura de Chillida de similar nombre instalada junto a la playa de la Concha de San Sebastián y a todo lo que la buena literatura,y la humanidad entera, deben al viento, este libro relata la aventura de Aura, una niña inquieta que con la ayuda de su abuelo intenta conseguir que regrese Céfiro, el viento de su pueblo que, cansado de pasar inadvertido, un día causó estragos importantes y se marchó. Más que un libro, se trata de un mapa de las peripecias y buenas artes que el viento ha legado a la humanidad. Son magníficas las frases de Guillén, Cernuda y León Felipe que abren el libro. Homenaje a la escultura de Chillida de similar nombre instalada junto a la playa de la Concha de San Sebastián y a todo lo que la buena literatura,y la humanidad entera, deben al viento, este libro relata la aventura de Aura, una niña inquieta que con la ayuda de su abuelo intenta conseguir que regrese Céfiro, el viento de su pueblo que, cansado de pasar inadvertido, un día causó estragos importantes y se marchó. Más que un libro, se trata de un mapa de las peripecias y buenas artes que el viento ha legado a la humanidad. Son magníficas las frases de Guillén, Cernuda y León Felipe que abren... Seguir leyendo

Los peines del viento

El Viento rizaba la cresta de las olas y se llevaba en volandas la espuma que brotaba cuando rompían contra el acantilado. Su vuelo era lento, fatigado por el peso de los años y el peso de las aves que aprovechaban su impulso para elevarse. Aquel viento vivía allí mucho antes de que se formaran las montañas, mucho antes de que se separaran las tierras de las aguas. Vivía allí antes que el mar; sin embargo, nunca había pensado que el mar fuera suyo. Él sabía que el mar es como un gato, independiente y libre; por eso no podía pertenecer a nadie.