El holocausto judío tiene miles de historias tan crudas y terribles como fascinantes por la vida que desprenden a pesar de tanta muerte. Esta historia real es una de ellas, y cuenta, mediante un texto sencillo y espectaculares ilustraciones ("marca de la casa"), la vida de Erika. A los pocos meses de vida fue incluida en un tren con destino a un campo de exterminio nazi pero su madre consiguió tirarla por una parte abierta del vagón. Una familia la acogió y la crió, y mucho tiempo después pudo reconstruir su vida y sus raíces, sin olvidar por supuesto el horrible daño causado por los nazis a su pueblo.

El holocausto judío tiene miles de historias tan crudas y terribles como fascinantes por la vida que desprenden a pesar de tanta muerte. Esta historia real es una de ellas, y cuenta, mediante un texto sencillo y espectaculares ilustraciones ("marca de la casa"), la vida de Erika. A los pocos meses de vida fue incluida en un tren con destino a un campo de exterminio nazi pero su madre consiguió tirarla por una parte abierta del vagón. Una familia la acogió y la crió, y mucho tiempo después pudo reconstruir... Seguir leyendo