Interesante y complejo cuento, que reflexiona sobre la sociedad y educación infantil en el siglo XIX. A través de una pareja de hermanos que viven en el campo, frente a otra que proviene de la ciudad, nos demuestra el dualismo extremo existente entre el futuro hacia el que camina la sociedad y los caducos valores del siglo anterior. Hoffman plantea así una concepción decimonónica a la vez que renovadora de la forma de vida y valores que imperaban entonces. La obra esconde, además, un mensaje oculto que el lector debe saber descifrar, por lo que se requiere una lectura atenta. Interesante y complejo cuento, que reflexiona sobre la sociedad y educación infantil en el siglo XIX. A través de una pareja de hermanos que viven en el campo, frente a otra que proviene de la ciudad, nos demuestra el dualismo extremo existente entre el futuro hacia el que camina la sociedad y los caducos valores del siglo anterior. Hoffman plantea así una concepción decimonónica a la vez que renovadora de la forma de vida y valores que imperaban entonces. La obra esconde, además, un mensaje oculto que el lector debe saber descifrar, por lo que se requiere una lectura atenta.

El niño extraño

Había una vez un noble señor llamado Tadeo von Brakel, que vivía en el pueblecito de Brakelheim, que había recibido como herencia al morir su padre el anciano señor de Brakel.
Los cuatro campesinos que además de él vivían en el pueblecito, le llamaban siempre noble señor, no obstante ir siempre despeinado.