Una curiosa manera de abordar el tema de los miedos nocturnos: dos situaciones paralelas protagonizadas por un niño y un pequeño monstruo en las que los dos se temen. Los dos, asustados, llaman a sus padres y ambos, finalmente calmados, se duermen. Una original historia de terrores nocturnos en la que aparece un monstruo que no da miedo, sino que representa una infancia distinta, en un mundo paralelo al humano. El texto es breve. Las expresivas imágenes, realizadas con lápices de colores, cuentan casi por sí solas lo que sucede en este divertido relato en el que no caben los tópicos. Una curiosa manera de abordar el tema de los miedos nocturnos: dos situaciones paralelas protagonizadas por un niño y un pequeño monstruo en las que los dos se temen. Los dos, asustados, llaman a sus padres y ambos, finalmente calmados, se duermen. Una original historia de terrores nocturnos en la que aparece un monstruo que no da miedo, sino que representa una infancia distinta, en un mundo paralelo al humano. El texto es breve. Las expresivas imágenes, realizadas con lápices de colores, cuentan casi por sí solas lo que sucede en este divertido relato en el que no caben los tópicos.

¡Papá!

En la cama, se lee.
Pero también se duerme. ¡Buenas noches!
Pero de repente... ¿Eh? ¿Qué? ¿Qué es eso?
“¡Papá!”
“¡Papá! ¡Papá! ¡Hay un monstruo en mi cama!”
“¡Tranquilízate! ¡Has tenido una pesadilla, eso es todo! Ven, vamos a ver a mamá. Está en el salón con unos amigos.”