Para configurar un estudio certero que defina las necesidades principales, y poder diseñar así un listado de puntos en donde sea necesario intervenir con mayor prontitud, la FGSR está escuchando las opiniones de los mayores expertos: los trabajadores que desarrollan su labor día tras día en la que está considerada una de las redes bibliotecarias más importantes de España.
Al igual que está ocurriendo en otros lugares, los nuevos tiempos requieren una redefición de la biblioteca pública, un proceso que pasa por conocer las necesidades y demandas actuales de la población, algo que la Fundación ya realiza en otras Comunidades Autónomas e incluso al otro lado del océano, gracias a un programa de colaboración con el CERLALC y la Fundación Bill & Melinda Gates que está ayudando a crecer a un numeroso grupo de bibliotecas iberoamericanas.
Durante las pasadas semanas se llevaron a cabo las primeras sesiones de trabajo conjunto, con grupos en dónde los bibliotecarios pudieron reflexionar de forma colectiva. La fase de diagnóstico seguirá desarrollándose a lo largo de estos meses con la idea de redefinir a la mayor brevedad una serie de mejoras conceptuales que se plasmarán en un documento base a partir del que se pueden iniciar nuevas acciones para reconvertir equipamientos y servicios bibliotecarios.
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