Álbum sin palabras que invita a descubrir sus ilustraciones a través de una lectura pausada, solo a ritmo lento es posible apreciar los cambios e incentivar en el pequeño lector una mirada atenta, curiosa y paciente frente a la naturaleza. El libro no se agota en un primer acercamiento, la complejidad que subyace tras su aparente sencillez abarca un abanico temático que va desde las transformaciones que se producen a lo largo de las cuatro estaciones hasta esbozar apuntes sobre materias más filosóficas como el paso del tiempo, la fugacidad de la vida, la permanencia y los ciclos vitales. El niño espectador no es insensible a estos temas y propuestas como la presente, incluida en el Plan Lector de Portugal y un hit de la LIJ a mediados de los setenta del siglo XX, propicia una excelente oportunidad para charlar con ellos y confrontar ideas y sensaciones.

La traducción de este clásico de la literatura gallega devuelve a la actualidad al añorado autor pontevedrés, fallecido en 2015, y pemite degustar su impactante prosa teñida de melancolía, dureza y conciencia social. La historia del pequeño Balbino, que vive en una aldea en la más absoluta pobreza, puede exportarse a otras realidades contemporáneas. El protagonista vive en un conflicto permanente con el niño rico, Manolito, hilo conductor que sirve para insertar experiencias vitales determinantes, como el encuentro con un personaje extraño a quien llaman «el Hereje» por sus blasfemias, un errático peregrinaje por el campo, los sentimientos que afloran cuando su hermano mayor Miguel se ve obligado a partir hacia América o su intención de convertirse en un hombre valiente para no morir del todo cuando muera. Las brumosas ilustraciones de Xosé Cobas confieren un ambiente único a un intenso relato especialmente indicado para lectores con cierto bagaje.

La editorial Nórdica hace su incursión en la literatura infantil y juvenil con un libro que no dejará a nadie indiferente. Se nota que ha sido editado con mucho mimo y cuidado, con muchos detalles que logran que hagamos una lectura muy placentera como, por ejemplo, dibujar el valle, las casas y sus lugares más significativos en las guardas del libro. Una historia ágil y muy bien contada con personajes conmovedores. La protagonista es una niña de 9 años, Tania, que vive en una granja con su padre, en el valle de Val de Lumbre. Su madre es científica y se pasa gran parte del año en Groenlandia investigando el deshielo de los polos. Es la única niña de todo el valle y es un terremoto. Es jovial, dicharachera, amante de la naturaleza y muy sociable. Su mejor amigo es su padrino, Gunnvald, que toca el violín y tiene 74 años. La llegada de una carta será el comienzo de varios cambios en su vida. Tania comprobará que el mundo de los adultos es más complicado de lo que ella pensaba.  En definitiva, un libro redondo que nos dará pena que se acabe.

El abuelo de Magdalena está a punto de morir. Ella no ha sido especialmente cercana con él, pero ahora que toda la familia paternal se reúne a acompañarlo en sus últimos momentos, Magdalena decide viajar a la finca del abuelo y aprovechar la oportunidad para averiguar más sobre su padre, las causas de su muerte, la personalidad alocada y liberada que tanto le criticaron. Busca así formar un recuerdo más concreto de su padre y llevar un duelo que le pesa en el corazón. Con una narración que entrelaza las consultas psiquiátricas a las que asiste Magdalena con lo que ocurre en su viaje a visitar al abuelo, los lectores van adentrándose en los conflictos propios de una adolescente y en la compleja trama de vínculos y desencuentros que se dan en el núcleo de una familia.

Novela poética que relata el mundo interior y la realidad cotidiana de Natalia, una maestra de escuela que vive en un pueblo con su madre, ya venida a menos por los años. La nostalgia de Natalia por el pasado y por su infancia, por una relación entrañable con su hermana que se aleja debido a un matrimonio desafortunado, la llevan a construir una ciudad imaginaria basada en la ciudad de Venecia. Esta se convierte en su escape de la realidad circundante y a la vez, en un factor que la encierra y la aísla de las posibilidades de la vida misma. El sosiego inicial de su ciudad imaginaria se vuelve un carcelero y Natalia decide finalmente destruir a Venecia. La novela hace una reflexión sobre la identidad y la soledad que invitan a la introspección. Fue galardonada con el Premio Nacional de Novela 2010.

Como suele hacer, el prestigioso autor e ilustrador de este libro nos regala de nuevo una intimista y estética oportunidad de reflexionar con los niños y adolescentes sobre sus propios sentimientos y conflictos, incapacidades y necesidades. Cada doble página encierra un rincón del mundo al que transportarnos cuando lo necesitemos. Un escondite, un refugio, que nos ampare por ser solo nuestro, de nuestra propia creación y disfrute. Tenemos en esta propuesta una herramienta fundamental para acompañar a los jóvenes lectores en la búsqueda de su propia identidad, en el conocimiento de sus miedos y de sus deseos, en el camino hacia la madurez.

Inscrita en un futuro próximo, esta novela no sólo construye una intriga que mantiene nuestro interés desde la primera hasta la última página sino que además aborda problemas bioéticos desde una perspectiva muy próxima, sin por ello sacrificar su complejidad y relevancia. De este modo, a medida que avanza nuestra lectura ahondamos en el mundo interior y en los dilemas de su protagonista y, al mismo tiempo, se suceden en nosotros preguntas y respuestas sobre temas como la vida artificial, la biotecnología y el control de los límites de la investigación científica. Una novela apasionante, seria y adecuada para amenizar una buena discusión.

Blaise Fortune es hoy ciudadano de la República Francesa con plenos derechos y conocimiento del idioma... pero nació en el Cáucaso, con el nombre de Kumail. A los siete años, tras un atentado terrorista en el que murió su madre, pudo cruzar la frontera francesa tras un largo viaje por autopista. Su vida no ha sido nada sencilla, y en Francia ha sufrido en carne propia las dificultades que entraña la condición de exiliado. Gloria, una mujer que lo había cuidado tras la muerte de su madre, le ayudó a escapar del Cáucaso, pero desapareció en la autopista que los llevaba a Francia. Años después, Blaise se dispone a ir en su busca para reencontrarse con ella y también con su pasado.

Una historia circular que comienza con una mujer observando a una niña y termina desvelando al personaje que observa la niña. Una interesante propuesta que habla de los cotidiano, de la observación, de la simultaneidad de acontecimientos que se llegan a dar en un segundo en una calle. Un álbum que hace pensar y con el que se disfrutará. Con unas ilustraciones de volúmenes planos y líneas gruesas que definen el dibujo, van apareciendo los personajes. Un cuento para leer en voz alta y escenificar.

Este álbum ilustrado habla de la relación entre un padre y su hija. Ella está encantada de pasar tiempo con su padre, al que admira y con el que se divierte mucho. Mientras padre e hija están pescando, la madre se queda con el hermano pequeño. Una historia de relaciones familiares, de cómo los miembros de la familia disfrutan haciendo cosas juntos y aprendiendo unos de otros. Las ilustraciones llenas de color, contribuyen a crear una atmósfera agradable y apacible. Un libro para disfrutar en familia.

De nuevo el autor e ilustrador taiwanés nos regala una profunda reflexión filosófica escondida bajo la cubierta de un álbum ilustrado. Algo tiene el estilo minucioso de Jimmy Liao, que llega a las profundidades psicológicas del lector. En esta ocasión aborda el tema de la felicidad desde su antítesis: la tristeza que provoca la preocupación. Y ofrece un inventario de inquietudes ilustradas que invitan al lector a pensar que en realidad no hay muchas cosas por las que merece la pena preocuparse.

A través de los ojos de un niño de seis años, observamos cómo reacciona ante distintos acontecimientos de la vida cotidiana como son la muerte de un ser querido, la llegada de una nueva hermana y la pérdida de sus mascotas. Su visión difiere en gran medida de la de sus progenitores, lo cual le provoca gran desconcierto. Las ilustraciones se coordinan perfectamente con el texto, jugando con las formas y colores para expresar distintas sensaciones. Cabe destacar por ejemplo, las distintas alusiones al paso del tiempo.

Las ciudades y su entorno cambian con el paso del tiempo, y en este caso se fija la atención en la evolución de una ciudad portuaria desde sus orígenes hasta nuestros días. Se presenta al lector el puerto como el lugar más importante de la vida en la ciudad costera y donde transcurren prácticamente todos los acontecimientos. Además, el libro ofrece una propuesta participativa, propone un juego de búsquedas en las ilustraciones, donde el niño ha de encontrar diferentes personajes o actividades que se desarrollaban en el puerto.

Al protagonista de esta cuento le parece difícil aguantar varios días junto al abuelo. Es viejo, todo lo hace despacio, y seguramente será aburrido pasar las vacaciones a su lado. Pero en cuanto se encuentran, el abuelo le propone que hagan juntos un pastel de manzana. En principio parece sencillo, si se hace con prisas y sin pensarlo mucho, cocinar semejante manjar puede ser fácil. Pero no si se prepara junto al abuelo: el nos enseñará a buscar la hierbabuena, el agua, las manzanas...y la paciencia para disfrutar mientras lo hacemos. De forma poética y con muchísimo cariño, la ilustradora y el autor de este libro nos acercan a este encuentroentre un abuelo y un nieto. El escepticismo del pequeño va dando paso al entusiasmo, a medida que sus ritmos se van acompasando, y la calma, la imaginación y la poesía con la que el abuelo enfrenta las empresas va calando en el nieto. 

En este álbum metaliterario nos reiremos disfrutando al ver cómo los protagonistas, la liebre y la tortuga de la famosa fábula, se agotan persiguiendo al conejo más rápido del mundo. En el camino se toparán con distintos personajes que les irán contando que ya hace mucho tiempo que pasó por allí, pero ellos no tirarán la toalla, y seguirán persiguiéndolo para pedirles que les firme el libro que lleva su nombre. Un divertido y brillante análisis sobre la relatividad del paso del tiempo.

Lembcke desliza suavemente su pluma para escribir, sin brusquedades, con un gran equilibrio, esta novela de crecimiento, de búsqueda de la propia identidad, de aceptación de la lucha interior entre el bien y el mal. Los acontecimientos fluyen con ligereza, como si quisieran pasar inadvertidos, al ritmo del pausado crecimiento biológico de la protagonista. Leena va desnudando ante el lector sus miedos, sus anhelos, sus frustraciones, y es especialmente cuidadosa para evitar que sus sentimientos se desborden. Una novela juvenil confeccionada con esmero que permitirá a muchos adolescentes identificarse con una protagonista rebosante de naturalidad y verismo.

Relatado en un tono intimista y sencillo, este libro narra los pensamientos de un niño feliz que poco a poco va conociendo el horror del exterminio judío realizado por los nazis. Es el tiempo de las palabras en voz baja de unos, y de la voz demasiado alta de otros. Su mejor amigo, Óscar, que a su vez es hijo de Antón, el mejor amigo de su padre, es primero apartado del colegio y luego llevado, junto a su familia, fuera de la ciudad. Han llegado los nazis. Nunca más lo volverá a ver, lo que le producirá tristeza y muchos pensamientos inquietantes. Un libro realista, con una escritura de calidad extraordinaria.