¿Por qué los mayores tienen tanta "cara"? Pueden estar despiertos hasta tarde y mandar a los niños a acostarse pronto, deciden cuándo es el momento de bañarse, regañan sin mucho criterio, impiden comer más dulces, incentivan la ingesta de verduras "poco atractivas", compran sus caprichos y niegan peluches y, lo más grave, casi nunca juegan y ponen siempre la misma excusa: "estoy ocupado" o "más tarde". Solo el artista japonés Shinsuke Yoshitake tiene la capacidad para dar respuestas convincentes a estas preguntas, con esa siempre original forma de contar historias y de retratar la vida de los más pequeños. La conversación entre el padre y la hija va ganando en intensidad y, para cada interrogante el progenitor hila una respuesta aún más imaginativa que intenta justificar las verdades de la protagonista. El enfado inicial se transforma en afecto y dulzura, en el marco del amor filial, mientras el lector dibuja una sonrisa de mayor tamaño a cada paso. Ahora es más fácil comprender las instrucciones que se formulan, con frecuencia, en el ámbito familiar, reflejadas en ilustraciones compuestas con trazos limpios que beben del lenguaje del cómic, y barnizadas por una limitada paleta de colores pastel, habituales en los diseños de este genuino creador, autor de piezas indispensables como Atascado, Gotitas o Piensa, entre otras muchas (casi todas ellas publicadas en España por este mismo sello editorial)
Descubre en Canal Lector su obra completa
¿Por qué los mayores tienen tanta "cara"? Pueden estar despiertos hasta tarde y mandar a los niños a acostarse pronto, deciden cuándo es el momento de bañarse, regañan sin mucho criterio, impiden comer más dulces, incentivan la ingesta de verduras "poco atractivas", compran sus caprichos y niegan peluches y, lo más grave, casi nunca juegan y ponen siempre la misma excusa: "estoy ocupado" o "más tarde". Solo el artista japonés Shinsuke Yoshitake tiene... Seguir leyendo
¡No es justo!

Estoy muy enfadada.
¿Por qué los mayores tienen tanta cara?
Voy a quejarme como es debido y conseguiré que dejen de hacer trampas.
PUM
¡¡Papá!!
¡No es justo!