Cuento destinado a primeros lectores, en el que a través de una historia muy sencilla se trata un tema fundamental del ser humano: la capacidad para decir que no. Los protagonistas no conocen esta palabra y siempre dicen que sí a todo, cuando por fin descubren la palabra “no” y la utilizan se dan cuenta de que lejos de ocurrir algo negativo todo parece cobrar otra dimensión, las cosas van mejor, ellos se siente más libres y más a gusto consigo mismos pues están haciendo aquello que realmente creen que deben hacer. Cuento destinado a primeros lectores, en el que a través de una historia muy sencilla se trata un tema fundamental del ser humano: la capacidad para decir que no. Los protagonistas no conocen esta palabra y siempre dicen que sí a todo, cuando por fin descubren la palabra “no” y la utilizan se dan cuenta de que lejos de ocurrir algo negativo todo parece cobrar otra dimensión, las cosas van mejor, ellos se siente más libres y más a gusto consigo mismos pues están haciendo aquello que realmente creen que deben hacer.

Macaco y Antón

Macaco y Antón trabajan en un tren de mercancías. ¿Quién no sabe lo que es un tren de mercancías?
Macaco y Antón son amigos. Pero no son amigos porque trabajen en el mismo tren de mercancías. Son viejos amigos.
Crecieron en la misma ciudad, en el mismo barrio, en la misma calle...
La casa de Macaco estaba en frente de la de Antón. Se asomaban a las ventanas para charlar.
Macaco y Antón eran buenísimos amigos. Si a uno se le ocurría una idea, al otro siempre le parecía bien.
–¿Jugamos al escondite?
–¡Vale!