Tras la separación de sus padres, Fabio, el protagonista de esta historia, y su madre se trasladan a vivir a una casa a las afueras de Roma, ciudad en la que viven. Desde un primer momento algo no va bien. No solo es la habitación llena de cosas de “niña” en la que le toca dormir o la continua aparición de un gato negro en la ventana. Lo peor es la presencia de un fantasma que se empeña en buscar su ayuda. Una novela de misterio y fenómenos paranormales que atrapa al lector desde las primeras páginas.
Tras la separación de sus padres, Fabio, el protagonista de esta historia, y su madre se trasladan a vivir a una casa a las afueras de Roma, ciudad en la que viven. Desde un primer momento algo no va bien. No solo es la habitación llena de cosas de “niña” en la que le toca dormir o la continua aparición de un gato negro en la ventana. Lo peor es la presencia de un fantasma que se empeña en buscar su ayuda. Una novela de misterio y fenómenos paranormales que atrapa al lector desde las primeras páginas.
El misterio del gato negro

“He decidido marcharme. No me busquéis. Un beso. Irene”. Aquella era la nota que encontraron en el salón los padres de la joven desaparecida. Habían transcurrido varios años desde entonces. Pero su madre seguía lamentándose por haberla dejado sola aquel fin de semana. Así que, para huir de aquel recuerdo, se marcharon de la ciudad y pusieron la casa en venta.