Pirañas, murciélagos de dientes afilados, fantasmas que muestran sus entrañas, sapos (un tanto asquerosos); cangrejos pellizcones y con malas digestiones, serpientes que comen otras serpientes y hasta una calabaza que se cuela entre animales para sintetizar la verdadera esencia del susto bien dado.... De todo hay en este animalario terrorífico, desarrollado a través de una secuenciación de troqueles verticales, cuyos protagonistas deambulan sobre un impactante juego de colores. Esta intensa gama cromática sirve para realzar la sorpresa que esconde cada objeto o personaje en su interior, y que los lectores tendrán que descubrir manejando la sencilla, pero divertida, ingeniería de papel con la que Dedieu quiere convencer a los más pequeños: ¡No tengáis miedo! Ideal para generar complicidad y arrancar un puñado de sonrisas antes de dormir.

Pirañas, murciélagos de dientes afilados, fantasmas que muestran sus entrañas, sapos (un tanto asquerosos); cangrejos pellizcones y con malas digestiones, serpientes que comen otras serpientes y hasta una calabaza que se cuela entre animales para sintetizar la verdadera esencia del susto bien dado.... De todo hay en este animalario terrorífico, desarrollado a través de una secuenciación de troqueles verticales, cuyos protagonistas deambulan sobre un impactante juego de colores. Esta intensa gama cromática sirve para realzar la... Seguir leyendo