En la vida real, a menudo, escuchamos las quejas de los hermanos pequeños, en cada familia, sobre los privilegios que suelen disfrutar los mayores. Pero, ¿y a la inversa? Beatriz Berrocal plantea una trama que da la vuelta a este tópico. Un grupo que cursa los últimos años de Primaria comparte su lamento común. Siempre que hay conflictos o problemas en casa, los padres tienden a culpar a sus integrantes injustamente pues, en la mayoría de los casos, los responsables son los pequeños de la casa. Con el objetivo inicial de digerir estas asperezas y paliar su frustración, varios compañeros del colegio, de condiciones sociales y procedencias diversas -he aquí la riqueza del argumento, pues permite acercarnos a realidades heterogéneas-; constituyen el club que da título a la obra, un espacio de reflexión en el que los lectores encontrarán ideas sobre las complicadas realidades cotidianas en otras partes del planeta, en comparación con esos pequeños enfados generados en la convivencia familiar y escolar. La novela, que incluye una guía didáctica elaborada por la editorial en su web para favorecer el debate en el ámbito educativo, es un interesante incentivo para desarrollar la empatía y aprender a minimizar el impacto de los "problemas del primer mundo". La dibujante e ilustradora valenciana Inma Almansa aporta una serie de láminas a página completa y otros esbozos gráficos entre los capítulos mediante los que ofrece una visión sobre las características físicas de los personajes y los escenarios en los que se ambienta.

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