Divertida historia que habla de la importancia de no dejarse engañar con falsas promesas imposibles de cumplir. La acción transcurre en un pueblo donde un día llega un vendedor de alfombras mágicas haciéndoles creer a todos los niños que con ellas serán capaces de volar. Pronto se descubrirá el engaño y, aunque los niños no cejan en su empeño por poder volar, aprenderán que no hay que dejarse engatusar con promesas vacías ni ilusiones imposibles. Las ilustraciones, sencillas y llenas de colorido, refuerzan el tono humorístico del relato. Divertida historia que habla de la importancia de no dejarse engañar con falsas promesas imposibles de cumplir. La acción transcurre en un pueblo donde un día llega un vendedor de alfombras mágicas haciéndoles creer a todos los niños que con ellas serán capaces de volar. Pronto se descubrirá el engaño y, aunque los niños no cejan en su empeño por poder volar, aprenderán que no hay que dejarse engatusar con promesas vacías ni ilusiones imposibles. Las ilustraciones, sencillas y llenas de colorido, refuerzan el tono humorístico del relato.

Mariluz y los niños voladores

Una tarde, llegó al pueblo de Mariluz García una extraña furgoneta. Era una furgoneta roja, roja como un tomate. Traía detrás un remolque con dosel y barandilla. En el costado del vehículo había un letrero que decía: EL GRAN YANYI.