No hace falta ser un manitas o tener un surtido laboratorio para realizar las 101 propuestas que se exponen. Con un material fácil de conseguir y detalladas explicaciones de los experimentos, es sencillo. Cada práctica incluye: una secuencia numerada de los pasos a seguir, una breve explicación científica del fenómeno, ejemplos de la vida cotidiana donde se produce el mismo mecanismo y comentarios sobre otras aplicaciones prácticas. Las abundantes fotografías ayudan a comprender mejor el texto. No hace falta ser un manitas o tener un surtido laboratorio para realizar las 101 propuestas que se exponen. Con un material fácil de conseguir y detalladas explicaciones de los experimentos, es sencillo. Cada práctica incluye: una secuencia numerada de los pasos a seguir, una breve explicación científica del fenómeno, ejemplos de la vida cotidiana donde se produce el mismo mecanismo y comentarios sobre otras aplicaciones prácticas. Las abundantes fotografías ayudan a comprender mejor el texto.

101 grandes experimentos

Aunque casi nunca le prestas atención, el aire está siempre a tu alrededor. No puedes verlo y sólo notas su presencia en forma de viento. Sin embargo, continuamente respiras aire. Te mantiene vivo, y también a los animales y las plantas. Los combustibles precisan aire para arder y las máquinas para funcionar. Sin aire, los aviones no podrían volar. El aire está formado por “gases”. Un gas es una sustancia que puede cambiar de forma y “expandirse”, o sea, aumentar de volumen hasta ocupar todo el espacio posible y tomar la forma del recipiente.