Este relato, escrito por la autora que dio vida a Frankenstein, describe una historia terrorífica en el más puro estilo gótico: un joven sediento de venganza hace un pacto con un ser malvado. El odio de Guido, el protagonista, quien se ha convertido en un desclasado vagabundo, hacia un noble poderoso le hace perder la razón. Se trata de un excelente relato que habla de las pasiones humanas. Acompañado de unas ilustraciones magníficas, que recuerdan al expresionismo alemán, por sus vivos colores y su línea sinuosa, acentúan el aspecto delirante de la historia. Este relato, escrito por la autora que dio vida a Frankenstein, describe una historia terrorífica en el más puro estilo gótico: un joven sediento de venganza hace un pacto con un ser malvado. El odio de Guido, el protagonista, quien se ha convertido en un desclasado vagabundo, hacia un noble poderoso le hace perder la razón. Se trata de un excelente relato que habla de las pasiones humanas. Acompañado de unas ilustraciones magníficas, que recuerdan al expresionismo alemán, por sus vivos colores y su línea sinuosa, acentúan el aspecto delirante de la historia.

La transformación

He oído decir que, cuando alguna aventura extraña, sobrenatural y nigromante le ha ocurrido a un ser humano, ese ser, aunque desee ocultarla, suele sentirse desgarrado por una especie de conmoción espiritual, y se ve forzado a desnudar ante otros las profundidades de su alma. Soy testigo de que es verdad. Me he jurado no revelar nunca a oídos humanos los horrores a los cuales me entregué una vez, en un demoníaco exceso de orgullo. El santo varón que escuchó mi confesión y me reconcilió con la Iglesia ha muerto. Nadie sabe que, un día... ¿Por qué no habría de seguir siendo así? ¿Por qué contar un relato de impía tentación de la Providencia y de humillación del alma?