Salta al oído que este libro es pura diversión: nada más abrirlo se escucha un jocoso y largo ronquido que predispone a pasarlo bien. El mismo espíritu juguetón anima la tipografía, que se distorsiona y dispara y en todas direcciones acompañando las simpáticas ilustraciones. Un leve argumento da paso a todo tipo de entretenimientos: chistes, adivinanzas, juegos de pistas, crucigramas, sopas de letras, recetas de cocina, manualidades... Un regalo de buenos ratos. Salta al oído que este libro es pura diversión: nada más abrirlo se escucha un jocoso y largo ronquido que predispone a pasarlo bien. El mismo espíritu juguetón anima la tipografía, que se distorsiona y dispara y en todas direcciones acompañando las simpáticas ilustraciones. Un leve argumento da paso a todo tipo de entretenimientos: chistes, adivinanzas, juegos de pistas, crucigramas, sopas de letras, recetas de cocina, manualidades... Un regalo de buenos ratos.

¡Cuidado, Morris!

Había una vez un mapache llamado Morris. Vivía con su mamá y su papá. Y con su hermanito, Rayujo.
Morris iba al cole, jugaba, dormía... Bueno, dormía hasta que alguien lo despertaba justo a mitad de un ronquido. Alguien que venía a pedirle ayuda...
Pero esta vez pasó algo muy raro. Nadie interrumpió el ronquido de Morris. Nadie vino a pedirle ayuda. Morris abrió un ojo, extrañado.