Celia nació en Madrid en 1932, de la mano de Elena Fortún (1886-1952). Madrileña castiza, hija de una familia "bien" de ideas liberales, la pequeña Celia no entiende de normas ni convencionalismos. Es una niña inquieta, de desbordante fantasía y curiosa por naturaleza. Vive feliz rodeada por una corte de adultos que la adoran. Sus preguntas y reflexiones, formuladas como divertidas e intrascendentes "cosas de niños", son una aguda crítica a la rancia sociedad que la autora quería cambiar desde sus ideas progresistas. El clásico por excelencia de la literatura infantil española del siglo XX.
Celia nació en Madrid en 1932, de la mano de Elena Fortún (1886-1952). Madrileña castiza, hija de una familia "bien" de ideas liberales, la pequeña Celia no entiende de normas ni convencionalismos. Es una niña inquieta, de desbordante fantasía y curiosa por naturaleza. Vive feliz rodeada por una corte de adultos que la adoran. Sus preguntas y reflexiones, formuladas como divertidas e intrascendentes "cosas de niños", son una aguda crítica a la rancia sociedad que la autora quería cambiar desde sus ideas... Seguir leyendo
Celia lo que dice

Me desperté asustada, y oí como si un gato estuviera arañando las maderas del balcón. ¡Los Reyes Magos!
Entraba la luna por las rendijas, y entraba el frío también…
De buena gana me hubiera levantado a ver lo que ocurría, pero ¡me daba un miedo!… Me tapé la cabeza y empecé a rezar:
«Jesusito de mi vida,
Tú eres niño como yo…»
De repente, ¡pum!, ¡pum!, ¡pum!, un ruido terrible de cosas que caen por el balcón…, y me encuentro en camisa, delante de un señor negro con corona, que está sentado en la barandilla.