La doble cara del miedo

El primer hombre echaba fuego por la boca. La cabeza de la primera mujer era separada del cuerpo y, a pesar de todo, sonreía. El segundo hombre tenía la mitad del cuerpo de persona y la otra mitad de leopardo. La segunda mujer se acariciaba la larga barba que le llegaba hasta los pechos. El tercer hombre se metió una espada por la boca...
¿Habéis visto? Eco parecía no creer lo que sucedía ante sus ojos ¿Habéis visto? ¡Es demasiado! ¡Demasiado!